Según encuesta, el 55% de escolares de esta edad ya ha consumido drogas ilegales. El 38% dijo que ha sido agredido físicamente.
El último episodio de violencia que se produjo en el Estadio Monumental tal vez sea un reflejo de lo que viene ocurriendo en las escuelas del país.
La Encuesta Global de Salud Escolar, realizada en el Perú, entre noviembre y diciembre de 2010, por la Dirección General de la Promoción de Salud delMinisterio de Salud –con auspicio de la Organización Mundial de la Salud–, ha detectado niveles altos de violencia en los colegios. El panorama es realmente preocupante.
En el sondeo, el 38% de los estudiantes refirió que ha sido agredido físicamente, y el 37.8% afirma que ha estado involucrado en una pelea.
Para el doctor Enrique Macher, director del Instituto Nacional de Salud Mental Honorio Delgado-Hideyo Noguchi, se trata de una cultura de la violencia aprendida de la televisión, pero que también obedece a los procesos de desintegración familiar tan comunes en la actualidad.
DROGAS. Otro punto alarmante es el temprano inicio de los escolares en el uso de estupefacientes. El 55.2% señaló que había consumido drogas ilegales –marihuana, cocaína o éxtasis– antes de los 14 años.
El 3.3% fumó marihuana una o más veces en el último mes, y el 1.6% admitió que ya ha usado anfetaminas.
Según Macher, el anhelo de la satisfacción inmediata del placer es el“motor de búsqueda de nuevas sensaciones” que lleva a los estudiantes al consumo de drogas. Igualmente, más de la mitad de escolares (59.6%) ya tomó alcohol y fumó su primer cigarrillo (60.3%).
SOLEDAD Y CONFLICTOS. El 17.4% de los colegiales indicó que había intentado suicidarse al menos una vez en los últimos 12 meses. El 10.5% se sintió solo la mayor parte del tiempo. Solo un 48% dijo que sus padres le habían demostrado afecto.
“Esto los pone en grave riesgo de sucumbir frente a una patología grave como la depresión”, manifestó el especialista.
Entre las medidas para enfrentar tal situación, el estudio recomienda la promoción de estilos de vida saludables y la prevención de riesgos en adolescentes, considerando el enfoque de género e interculturalidad.
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